Del 19 al 21 de abril, se llevó a cabo la Asamblea Nacional del Laicado Marista de Venezuela en la casa de formación de Los Teques. Se reunieron a 40 participantes, entre hermanos y laicos maristas, con el objetivo de fortalecer y dar continuidad a los procesos laicales que están emergiendo en las diversas obras maristas del país.
En la apertura de la asamblea, el Hermano Orlando Escobar, animador provincial, hizo hincapié en la importancia de vivir este encuentro con un sentido profundo de fraternidad, vivido en el contexto del aniversario 25 de la canonización de San Marcelino Champagnat.
Uno de los enfoques principales de la asamblea fue profundizar en el rol del laico marista vocacionado y alinear las reflexiones con los temas tratados durante la reciente III Asamblea Internacional De La Misión Marista, celebrada en días anteriores en España. Richard Peñaloza, laico marista de Maracaibo, representó a Venezuela y presentó un balance de las actividades realizadas durante el encuentro, destacando los logros y desafíos abordados por la comunidad.
En la tarde del segundo día de asamblea, Claudia Rojas Carvajal, animadora del laicado en la región Arco Norte, presentó la ponencia ‘‘Ser marista laico vocacionado: según el legado y sueño de Champagnat’’, donde a la vez, dio a conocer la realidad de este carisma en la provincia para luego liderar run diálogo con los participantes.
Por otra parte, María Gabriela Santaniello, coordinadora de laicos en Venezuela, compartió las perspectivas y retos actuales, enfatizando la necesidad de consolidar los proyectos de vida tanto a nivel personal como comunitario. Destacó la importancia de llevar adelante proyectos concretos y efectivos que reflejen la alegría y el compromiso de ser laicos maristas, encarnando así el carisma marista en sus actividades diarias.
Al concluir la asamblea, se presentaron aportes surgidos de los grupos de trabajo, los cuales profundizaron en la figura del laico marista vocacionado como parte esencial y activa de la familia marista a nivel global, reflejando el compromiso con la comunidad marista en el país.
Durante la eucaristía de envío, Eródita Ángel, del grupo de laicos de Maracay, hizo la renovación de su vinculación al carisma marista.